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Asalto asimétrico a Colombia

Joseph M. Humire

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El 28 de abril estallaron en Colombia, protestas luego que el presidente Iván Duque introdujera una reforma tributaria, que afectaría a una población ya cansada por la pandemia. Cuatro días después, el gobierno de Duque retiró la reforma, pero las protestas se intensificaron y se terminaron en enfrentamientos violentos entre la fuerza pública, manifestantes civiles y otros grupos. Según la Cancillería al 16 de mayo, se contaban 34 muertes, incluido al menos un policía, y más de 1.700 heridos, más de la mitad de los cuales fueron policías heridos por objetos contundentes (armas blancas, y de fuego, explosivos, piedras  etc.).[1] También ocurrieron más de 700 detenciones por la provocación de incendios, actos de vandalismo, robos y destrucción de bancos, vehículos, cajeros automáticos, monumentos culturales e infraestructura pública.[2]

Varias organizaciones de Derechos Humanos han denunciado repetidos abusos y uso excesivo de la fuerza por parte de la policía contra los manifestantes, incluido el uso de tanques con múltiples lanzadores de proyectiles no letales, particularmente en la ciudad de Cali.[3] El ministro de Defensa, Diego Molano, informó el 3 de mayo que al menos seis (6) grupos criminales estaban detrás de la violencia y los  actos de vandalismo, infiltrando las protestas que de otro modo serían pacíficas. El  Ministro mencionó a las disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-D), al Ejército de Liberación Nacional (ELN) y a los Escudos Azul y Negros del movimiento juvenil M-19. Posteriormente, el 8 de mayo, el Ministro anunció que las autoridades colombianas detuvieron a un comandante de los frente urbano del ELN, días después también fue capturado un disidente de las FARC, estos grupos estarían provocando la violencia en la ciudad de Cali mediante armas improvisadas y coordinando con grupos de jóvenes milicianos y venezolanos aun no identificados.[4]

En noviembre de 2019 y en septiembre de 2020, el país experimentó protestas similares con menor intensidad, donde se identificaron grupos de jóvenes milicianos que infiltraron las protestas y desataron una escalada de violencia que consumó diferentes hechos de vandalismo.[5] En el período previo a las protestas de 2019 en Colombia, el régimen de Maduro envió una sutil advertencia a través de Diosdado Cabello, quien se refirió a las protestas como una “brisa bolivariana” que fluye desde Venezuela. El 7 de abril, antes de las protestas actuales, Diosdado Cabello volvió a emitir una amenaza velada a Colombia en su programa de televisión El Mazo Dando, afirmando “vamos a hacer la guerra en su territorio” en respuesta a la posible agresión percibida contra el régimen venezolano.[6] La guerra asimétrica ya llegó a Colombia.

ESTRATEGIA ASIMÉTRICA DE VENEZUELA

Desde que comenzó su mandato en agosto de 2018, el gobierno de Presidente Ivan Duque ha estado lidiando con provocaciones por parte del régimen de Maduro. Sin embargo, Colombia ha sido el objetivo principal de la estrategia de Seguridad Nacional de Venezuela desde los albores de la Revolución Bolivariana. Una estrategia que esta trazada para la aplicación de una guerra asimétrica contra los adversarios de la Revolución Bolivariana, en este caso: Colombia.

En noviembre de 2004, Hugo Chávez se dirigió a las Fuerzas Armadas Nacionales (FAN) de Venezuela con el objetivo de desarrollar una nueva doctrina de defensa para el conflicto contemporáneo a través de un documento denominado “El Nuevo Mapa Estratégico”.[7] Unos meses después, en abril de 2005, en el I Foro Militar sobre Cuarta Generación y Guerra Asimétrica en Caracas, Chávez presentó este documento y dijo: “Hago un llamado a todos a iniciar un… esfuerzo para comprender las ideas, conceptos y doctrina de la guerra asimétrica”.[8] Años después, en 2007, Chávez intentó legitimar su transformación del ejército venezolano a través de un referéndum constitucional que fracasó. No obstante, en septiembre de 2008, utilizó un decreto ejecutivo para transformar al ejército venezolano de una estructura convencional con capacidades sobre los dominios de la Defensa a una estructura asimétrica centrada en el control del territorio venezolano. Las nuevas Fuerzas Armadas Bolivarianas (FANB) de Venezuela estarían conformadas por cinco (5) Regiones de Defensa Integral, denominados “REDI”, integrados con milicias civiles y otros grupos de crimen organizado repartidos en veinticuatro 24- Zonas de Defensa Integral conocidos como “ZODI”.

La nueva “Geometría del Poder” cambió el enfoque del ejército venezolano de la protección de la soberanía estatal a la expansión territorial que, como dijo Chávez, “rompería las cadenas … de la vieja geografía conservadora, imperial y colonial de Venezuela”.[9] Entre 2013- 2015, Nicolás Maduro expandió esta estructura asimétrica de defensa integral a ocho (8) regiones (REDI), veintiocho (28) zonas (ZODI) y noventa y nueve (99) Áreas de Defensa Integral (ADI) convirtiéndose en el nuevo “constructor de mapas en jefe” con el ejército venezolano  a esto se le agrego la integración de los Grupos Armados Organizados (GAO) de Colombia.[10] En 2020, Maduro agregó dos (2) nuevas zonas temporales y en marzo pasado, agregó una más a lo largo de la frontera colombiana-venezolana, donde sus militares están involucrados en operaciones de combate contra núcleos de las disidencias de las FARC, liderados por Miguel Botache Santillana, alias ”Gentil Duarte” y que tienen el  control del narcotráfico transfronterizo.

EL PAPEL DE LAS DISIDENCIAS DE LAS FARC Y ELN

Tras la firma del Acuerdo de Paz de 2016, algunas facciones de las FARC se negaron a deponer las armas y parte de su liderazgo buscó refugio en Venezuela. Conocidos como disidentes de las FARC o “FARC-D”, el ex negociador de paz Luciano Marín Arango, alias “Iván Márquez”, anunció en 2019 una nueva etapa de la lucha armada denominada 2da Marquetalia. Mientras tanto, otra facción de las FARC-D, liderada por Gentil Duarte, continuó sus actividades ilícitas en Colombia. El 21 de marzo pasado, la facción de Duarte atacó al ejército del régimen de Maduro provocando un conflicto armado en la frontera con Colombia con el limítrofe estado Apure de Venezuela. Muchos analistas atribuyeron esto a luchas internas entre narcoterroristas o incluso a una fractura parcial de la relación FARC con Maduro.[11] Esto ignora los beneficios estratégicos que el régimen de Maduro obtiene del actual conflicto fronterizo, como pretexto para aumentar las zonas temporales recientemente establecidas. de la estructura asimétrica de Defensa de Venezuela con poder de combate adicional, al incluir drones de fabricación rusa e infantería reforzada asesorada e instruida por Rusia.[12] Maduro anticipó el conflicto armado en la frontera entre Venezuela y Colombia hace meses, cuando creó un grupo de trabajo antidrogas, preparando el escenario para que el régimen acusara a Colombia de tráfico de drogas y para futuras operaciones transfronterizas del ejército venezolano.[13]

Si bien un conflicto armado permite al régimen de Maduro desplegar fuerzas de combate adicionales en la frontera entre Venezuela y Colombia, las protestas actuales en Colombia han abierto una nueva oportunidad para las FARC-D y el ELN. En el suroeste de Colombia, el puerto de Buenaventura es el más estratégico para las carteles de droga porque su ubicación a lo largo de la costa del Pacífico en Colombia permite que los contenedores con productos ilícitos lleguen a casi cualquier parte del mundo con un riesgo mínimo de detección.[14]

Cuando estallaron las actuales protestas, Cali, la tercera ciudad más grande del país, a poco más de dos horas del puerto de Buenaventura, la que experimentó los niveles más altos de violencia y vandalismo. Según Semana, una destacada revista colombiana, un informe clasificado de la inteligencia colombiana indicó que Gentil Duarte e Iván Márquez están utilizando el aumento del flujo de narcóticos en Buenaventura para financiar una renovada misión de terrorismo urbano, comenzando sus operaciones con y en Cali.[15] Las recientes detenciones por parte de la policía colombiana de un terrorista urbano del ELN conocido como “Lerma” y un combatiente de las FARC-D alias “Jacobo” por organizar la violencia en Cali durante las protestas recientes, sugieren que la inteligencia reseñada ha sido correcta.

Ya sea a través del terrorismo urbano o enfrentamientos  fronterizos, estos escenarios presentan múltiples oportunidades para que Venezuela despliegue su estrategia de guerra asimétrica en territorio colombiano. El régimen de Maduro ha integrado plenamente la estructura asimétrica de Defensa de Venezuela con el ELN y las FARC-D, que se han convertido en grupos narcoterroristas binacionales con igual presencia en ambos países. Esta estructura está impulsada por dos de los productos básicos más importantes del mundo, el petróleo y el oro, combinados con otras formas importantes de financiación ilícita y tráfico de drogas.

El pasado 5 de mayo, en medio de las protestas en Colombia, la cuenta de prensa de la FANB en Twitter publicó el mapa de la Capitanía General de Venezuela, la imagen es un retroceso al “Reino de Venezuela” que permite la visión y perspectiva según la mirada del régimen de Maduro, determinando un territorio de la revolución bolivariana en la “Gran Colombia”.[16] El régimen venezolano se ha preparado durante décadas para este momento, cuando el Estado colombiano se encuentra en su punto más débil. Y tienen la estrategia asimétrica de utilizar las redes ilícitas como la vanguardia, en este siglo XXI, para conquistar más territorio de su vecino. La autoproclamada Revolución Bolivariana necesita capitalizar el malestar actual en Colombia , que busca fracturar, amplificando la desinformación y mala información que causa confusión y siembra divisiones sociales.

LA DESINFORMACIÓN EXTRANJERA

Lo que está sucediendo en Colombia no es un incidente aislado. Incluso las protestas en los Estados Unidos en el verano de 2020 tuvieron tácticas de desinformación e iconografía común sorprendentemente similares a las de las protestas de 2019 en América del Sur.[17] La ola de protestas de 2019 que sacudió a Ecuador, Chile y Colombia dejó cada vez más claro que se estaban llevando a cabo con algún nivel de coordinación en la región.[18]  Sin embargo, esa coordinación se encuentra en el dominio cibernético donde sofisticadas granjas o bodegas, actúan desde diferentes centros en red en lugares distantes. Los granjas envían spam a las redes sociales con bots  y cuentas de trolls  que exacerban las protestas y difunden falsas narrativas.

En un estudio de 7,6 millones de interacciones digitales, se encontraron vinculaciones con las protestas de Colombia y Chile de 2019, los analistas forenses digitales encontraron que menos del 1 por ciento de los usuarios generaban casi el 30 por ciento del contenido, con la mayoría de las cuentas geolocalizadas en Venezuela.[19] Otro estudio encontró que 4.8 millones de tweets entre el 20 de octubre y el 5 de noviembre de 2019 que un gran grupo de los hashtags a favor de las protestas en Chile se originaron en Venezuela, Nicaragua y Cuba.[20] El 11 de diciembre de 2019, durante un evento en aniversario de las Autoridades Aduaneras de Colombia, la Vicepresidenta Marta Lucía Ramírez sugirió que al menos parte del tráfico de las redes sociales que alimentaron las protestas en Colombia se proyectaron fuera del país, desde Venezuela y Rusia.[21]

Colombia tiene una población de 51 millones de personas, con casi tres cuartas partes del país conectadas a Internet, principalmente a través de sus celulares. De las diez -10- horas diarias que los colombianos promedian en Internet, cuatro -4- de ellas las dedican a las redes sociales.[22]  Este dato expresa la urgencia donde las autoridades colombianas deben colocar foco para prevenir la manipulación digital y la desinformación en las protestas en curso, que es la lección más importante de lo ocurrido en Colombia y Chile en octubre y noviembre de 2019.

De hecho, algunos estudios sugieren que se está realizando un esfuerzo de desinformación similar actualmente en Colombia. Según una empresa de minería de datos con sede en Miami, hay más de 7.000 cuentas de trolls en las redes sociales que participan activamente en las protestas actuales de Colombia.[23] Según la empresa, las cuentas de trolls tienen como objetivo bloquear y enviar spam a cualquier comentario o publicación que critique  las protestas, al tiempo que amplifica narrativas y hashtags específicos como #NosEstanMatando que muestran solo un aspecto de la realidad en el terreno.

Lo más preocupante es que el análisis forense revela que estas más de 7.000 cuentas de trolls son administradas por granjas de bots en Bangladesh, México y Venezuela, posiblemente administradas por servidores en Rusia y China. La empresa de minería de datos exhibe muestras de cuentas de trolls con sede en Asia que han hecho imágenes y videos virales específicos de las protestas en Colombia, sacados de contexto.[24] El Centro por una Sociedad Libre y Segura –SFS-  no ha verificado de forma independiente el análisis de la empresa de Miami, sin embargo, coincide con esfuerzos de desinformación previos, que se han observado en Chile, Ecuador y otros países, y que sí han sido verificados.

Según el Laboratorio de Investigación Forense Digital (DFRLab) del Atlantic Council, la sesgada información también fue generalizada durante las actuales protestas en Colombia. Un ejemplo ordinario, se da cuando reciclan videos de protestas en otros países y presentarlos incorrectamente como imágenes de protestas actuales. El DFRLab cita específicamente ejemplos de imágenes recicladas de enfrentamientos entre policías y manifestantes de 2019 en Ecuador y Chile, que fueron presentados erróneamente por periodistas y académicos colombianos como evidencia de fuerza excesiva por parte de ESMAD, una unidad policial especializada en antidisturbios que fue desplegada para controlar las protestas.[25] Estos errores son comunes en medio del caos, sin embargo, el daño reputacional que le hacen a las fuerzas policiales y de seguridad colombianas es casi irreversible, erosionando aún más la legitimidad del gobierno de Duque.

UNA CRISIS DE LEGITIMIDAD

América Latina es posiblemente la región más afectada económicamente por la pandemia mundial. Colombia ha visto evaporarse más de diez años de crecimiento económico en un año, con una contracción del 6,4 por ciento en su PIB el año pasado, y el desempleo disparado a casi el 16 por ciento.[26] Era solo cuestión de tiempo antes de que el malestar social se reflejara en las calles. Los agravios legítimos de larga data sobre los servicios públicos deficientes, la falta de oportunidades económicas y la corrupción desenfrenada se están intensificando y han puesto al presidente de Colombia, Iván Duque, en un atolladero.

La promesa del presidente Duque de liberar el capital humano de Colombia a través de su “Economía Naranja” estaba en marcha, pero la pandemia colocó estos planes en pausa. En cambio, ahora está atendiendo a una economía que está cada vez más endeudada con un déficit creciente, como muchos presidentes de centro derecha en la región, el gobierno de Duque se centró en el desafío económico inmediato y pasó por alto las dimensiones geopolíticas de más largo alcance que rodean la situación. Algunos dicen que este es un caso de buena política pero malos políticos –sin sensibilidad social-, pero es mucho más. El elaborado plan fiscal con un nombre atractivo, “Ley de Solidaridad Sostenible”, resultó insuficiente para sofocar a una población angustiada que, durante más de una década, a pesar del crecimiento económico, ha sido golpeada por la creciente inseguridad, un plan de paz fallido, políticas tóxicas y fuerzas externas que capitalizan y catalizan la situación.

La crisis en Colombia no es solo una crisis socioeconómica, es una crisis de legitimidad política de las instituciones estatales. Es un asalto a la democracia y al estado de derecho. El pueblo colombiano, especialmente los manifestantes pacíficos, no son los culpables de la crisis, son las víctimas. Como los más vulnerables de la sociedad, los pobres y la clase media son concebidos como una herramienta por quienes desarrollan la guerra asimétrica tanto en el campo doméstico como desde el exterior de Colombia. Esta es una amenaza que las fuerzas militares y policiales no pueden resolver por sí solas. Requiere un esfuerzo mucho más amplio de las fuerzas democráticas en toda la región para comprender que como va Colombia, va el resto de América Latina.

NOTAS Y CITAS


[1] Hechos y cifras extraídos de dos Fichas Informativas elaboradas el 6 y 13 de mayo de 2021 por la Cancillería de Colombia sobre el “Balance del Huelga Nacional en Colombia”.

[2] Op cit.

[3] “Human Rights Watch denuncia el uso de tanques con proyectiles en Colombia,” Pledge Times, May 7, 2021. https://pledgetimes.com/human-rights-watch-denounces-the-use-of-tanks-with-projectiles-in-colombia/

[4] “Autoridades confirman la captura de alias ‘Lerma’, cabecilla del ELN señalado de actos vandálicos en Cali,” Infobae, May 8, 2021.  https://www.infobae.com/america/colombia/2021/05/08/autoridades-confirman-la-capturade-alias-lerma-cabecilla-del-eln-senalado-de-actos-vandalicos-en-cali/

[5] “EL TERRORISMO DE LOS INFILTRADOS,” Instituto de Estudios Geoestratégicos y Asuntos Politicos, Universidad Militar Nueva Granada, Bogota, Colombia, 31 de Enero, 2020. https://www.lalinternaazul.info/2020/01/31/elterrorismo-de-los-infiltrados/

[6] “Diosdado Cabello amenaza con hacer la guerra en Colombia si EE. UU. ataca a Venezuela,” FM Santander, 8 de Abril, 2021. https://www.youtube.com/watch?v=d6IaSXSsS1g

[7] Manwaring, Max. “Venezuela’s Hugo Chávez, Bolivarian Socialism, and Asymmetric Warfare,” Strategic Studies Institute, US Army War College, October 2005.

[8] Manwaring, Max. “Venezuela as an Exporter of 4th Generation Warfare Instability,” Strategic Studies Institute, US Army War College, December 2012.

[9] Otis, John. “Chavez plans new ‘geometry of power’ in Venezuela,” Houston Chronicle, November 28, 2007. https://www.chron.com/news/nation-world/article/Chavez-plans-new-geometry-of-power-in-Venezuela1805476.php

[10] Arocha, José Gustavo & Humire, Joseph. “¿Cual es el Rol de las Fuerzas Armadas en Venezuela?” Capitulo en Desafíos para la Seguridad y la Defensa en el Continente Americano 2020-2030. Athena Lab, Santiago de Chile, Diciembrer 2020.

[11] Acosta, Luis Jaime. “Disputa por narcotráfico, causa de combates en Venezuela y desplazamiento a Colombia” Reuters,28 de Marzo, 2021.  https://www.reuters.com/article/colombia-venezuela-idLTAKBN2BK0HG

[12] Gomez, Daniel. “La Fuerza Armada de Venezuela usa drones rusos en el conflict contra los grupos irregulars de la frontera con Colombia,” Al Navio, 14 de Abril, 2021. https://alnavio.es/noticia/21691/actualidad/la-fuerza-armada-devenezuela-usa-drones-rusos-en-el-conflicto-contra-los-grupos-irregulares-de-la-frontera-con-colombia.html

[13] “Creada Superintendencia Nacional de Lucha Contra las Droga” Vicepresidencia de la Republica Bolivariana de Venezuela: http://vicepresidencia.gob.ve/?p=1726

[14] McDermott, Jeremy. “Buenaventura: vía de menor Resistencia para la cocaína,” Semana Opinion, 17 de Abril, 2019. https://www.semana.com/opinion/articulo/el-narcotrafico-crece-en-el-puerto-del-litoral-pacifico-jeremymcdermott/609911/

[15] Revista Semana. “Exclusiva: la historia secreta de la violenta toma de Cali,”, 15 de Mayo, 2021. https://www.semana.com/nacion/articulo/exclusivo-la-historia-secreta-de-la-violenta-toma-de-cali/202147/

[16] Publicada por la cuenta oficial de Twitter del Ministerio de Defensa, Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas de Venezuela, (@PrensaFANB) el 5 de Mayo, 2021: https://twitter.com/PrensaFANB/status/1389932321806196739?s=08

[17] Grantham, David. “U.S. riots take a page from the Latin American socialist playbook,” Breitbart News, August 1, 2020. https://www.breitbart.com/latin-america/2020/08/01/grantham-u-s-riots-take-a-page-from-the-latinamerican-socialist-playbook/

[18] Farah, Douglas and Caitlyn Yates. “Turmoil in the Western Hemisphere: The Role of the Bolivarian Joint Criminal Enterprise in Latin America’s Unrest,” William J. Perry Center for Hemispheric Defense Studies, March 2020. https://www.williamjperrycenter.org/sites/default/files/publication_associated_files/Turmoil%20in%20the%20Western%20Hemisphere.pdf

[19] Farah, Douglas and Caitlyn Yates. “Turmoil in the Western Hemisphere,” Global Americans, April 15, 2020. https://theglobalamericans.org/2020/04/turmoil-in-the-western-hemisphere/

[20] Aikanarov and Josepenam. “ANALISIS TWITTER PROTESTAS CHILE (Parte 2) ## Detección de comunidades y comportamientos en base a Nacionalidad y Polaridad,” Github, 28 de Noviembre, 2019. https://github.com/connectalabs/riots_chile_analisis/blob/master/analisis_tweets_sobre_levantamiento_social.md

[21] Sierra, Paola. “Desde Venezuela y Rusia se estimulan las protestas: vicepresidenta,” Caracol, 12 de Diciembre, 2019. https://caracol.com.co/radio/2019/12/12/nacional/1576160520_888848.html

[22] Los datos fueron tomados del Digital 2021 Colombia Report hecho por Hootsuite and We Are Social, January 2021. Para acceder a la colección completa de informes, visite, https://datareportal.com

[23] “¿Cómo operan cuentas falsas en redes, desde otros países, para agitar el paro en Colombia” La FM entrevista a Marcel Ramírez el 12 de Mayo, 2021. https://www.lafm.com.co/colombia/como-operan-cuentas-falsas-en-redes-desdeotros-paises-para-agitar-el-paro-en-colombia

[24] Investigadores de hablaron con Marcel Ramirez de la empresa Inteligencia Artificial, Marketing Politico, Mineria de Datos, quien ha publicado sobre sus hallazgos en el siguiente link, https://www.marcelramirez.com/blog

[25] Daniel Suárez Pérez and Esteban Ponce de León, “Misinformation about Colombia’s national strike spreads online and on air,” Digital Forensic Research Lab (DFRLab), May 7, 2021, https://medium.com/dfrlab/misinformation-aboutcolombias-national-strike-spreads-online-and-on-air-9c754666c06

[26] Los datos fueron tomados del Departamento Nacional de Planeación (DNP) y el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) que miden las tasas laborales y otras estadísticas en Colombia.